Todavía gran parte de la población Dominicana no se repone del decepcionante y humillante papelazo del equipo dominicano en el Clásico Mundial de Béisbol.
En las calles de la República Dominicana, universidades, colmadones, barberias, medios de comunicaciones, en fin, en cualquier lugar donde se toque el tema del béisbol, se escucha hablar del desempeño del equipo dominicano y no es para menos escuchar personas atribuyendo el fracaso a tal o (equis) persona o enumerando las posibles causas de la debacle.
Uno de los más prestigiosos periódicos del país (Listín Diario), se hizo eco de un supuesto viaje a Santo Domingo desde Puerto Rico realizado por un grupo de lanzadores Edinson Vólquez, Johnny Cueto y Pedro Viola, más el campo corto Hanley Ramírez, un total de cuatro, luego de un día de prácticas, y en la antesala del juego decisivo de Dominicana contra Holanda, donde este último ganó con marcador de 2 por 1 eliminando del Clásico al conjunto quisqueyano, siendo las más grande sorpresa del evento.
Listín Diario pudo conocer que efectivamente 4 jugadores criollos vinieron a Santo Domingo, desde San Juan Puerto Rico, la tarde del lunes 9 en un vuelo normal de la línea American Eagle.
Pero ¿Cuál sería el móvil del viaje?. Según trascendió, ellos habrían venido a una fiesta en un lugar público de Boca Chica, y regresando la mañana del martes a San Juan.
Este hecho tan bochornoso refleja el grado de inmadurez, falta de entrega y poca conciencia con que muchos peloteros asumieron el evento internacional, sin saber ni un ápice de lo que significa representar el país en una competencia de tal magnitud como ésta, que sin importarle un bledo, algunos se dedicaron a las francachelas, parrandear y comprar gallos, mientras el combinado de la enseña tricolor se encontraba en Puerto Rico.
La sociedad dominicana debe condenar este acto de charlatanería por parte de un grupo de peloteros dominicanos, que retrata de cuerpo entero, la indisciplina, el irrespeto, entre otras cosas, que exhibieron en el clásico, dando al traste con el resonante fracaso del equipo dominicano, en lugar de jugar con honor y dignidad por nuestro país.
Pero como dice el refrán: “Ya el palo esta dao”.
En las calles de la República Dominicana, universidades, colmadones, barberias, medios de comunicaciones, en fin, en cualquier lugar donde se toque el tema del béisbol, se escucha hablar del desempeño del equipo dominicano y no es para menos escuchar personas atribuyendo el fracaso a tal o (equis) persona o enumerando las posibles causas de la debacle.
Uno de los más prestigiosos periódicos del país (Listín Diario), se hizo eco de un supuesto viaje a Santo Domingo desde Puerto Rico realizado por un grupo de lanzadores Edinson Vólquez, Johnny Cueto y Pedro Viola, más el campo corto Hanley Ramírez, un total de cuatro, luego de un día de prácticas, y en la antesala del juego decisivo de Dominicana contra Holanda, donde este último ganó con marcador de 2 por 1 eliminando del Clásico al conjunto quisqueyano, siendo las más grande sorpresa del evento.
Listín Diario pudo conocer que efectivamente 4 jugadores criollos vinieron a Santo Domingo, desde San Juan Puerto Rico, la tarde del lunes 9 en un vuelo normal de la línea American Eagle.
Pero ¿Cuál sería el móvil del viaje?. Según trascendió, ellos habrían venido a una fiesta en un lugar público de Boca Chica, y regresando la mañana del martes a San Juan.
Este hecho tan bochornoso refleja el grado de inmadurez, falta de entrega y poca conciencia con que muchos peloteros asumieron el evento internacional, sin saber ni un ápice de lo que significa representar el país en una competencia de tal magnitud como ésta, que sin importarle un bledo, algunos se dedicaron a las francachelas, parrandear y comprar gallos, mientras el combinado de la enseña tricolor se encontraba en Puerto Rico.
La sociedad dominicana debe condenar este acto de charlatanería por parte de un grupo de peloteros dominicanos, que retrata de cuerpo entero, la indisciplina, el irrespeto, entre otras cosas, que exhibieron en el clásico, dando al traste con el resonante fracaso del equipo dominicano, en lugar de jugar con honor y dignidad por nuestro país.
Pero como dice el refrán: “Ya el palo esta dao”.
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